Llegó a los 18 años al Real Madrid, sin alharacas, era un desconocido para el gran mundo del fútbol y en poco tiempo se hizo con un sitio en el centro de la defensa en una rotación constante con Ramos y Pepe. Sin embargo, tras una década de éxitos y goles con su camiseta, el delantero vive un momento aciago en el club, soterrado por las lesiones, por la alta competencia con la que convive la plantilla dirigida por Pep Guardiola y porque su contrato acaba el próximo junio, una condición que desde enero le permite negociar su próxima vinculación con cualquier otro club.
Categorías