La Casa Alba, semillero de las futuras estrellas de Colo Colo, fue inaugurada en 2008. El objetivo de este edificio es promover el desarrollo de un selecto grupo de talentos y promesas juveniles que resultan de la búsqueda y selección de jugadores que se realizan tanto en Santiago como en regiones. Característico es el diseño que dan los colores de las butacas, con un efecto en degradado de blanco a negro (este efecto también se da en los asientos de cemento de los sectores populares, con la diferencia que fueron pintados por la Garra Blanca) y con el diseño de un cacique (símbolo del club) en el sector Cordillera.